La
globalización disminuye la práctica de la danza.

Vivimos en un mundo
global en el que el intercambio de ideas y formas de hacer arte es parte
importante de la creación y la enseñanza. La diversidad es muy importante
porque vivimos en un mundo global y los bailarines y coreógrafos del futuro
tienen que nutrirse de información de todo el mundo para ofrecer obras que
satisfagan las necesidades estéticas de los espectadores del Siglo 21, por eso
es muy importante establecer intercambios culturales, si no se hace se pierde
la posibilidad de enriquecerse con las herencias múltiples que ofrece el mundo.
Lo importante en este
momento es compartir información, no clasificarla, sino integrarla a la mayor
parte de personas posibles.. ¿Es
este el caso de las danzas?
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